jueves, 29 de marzo de 2012

HUELGA GENERAL... (y van 8)


¡¡¡A LAS BARRICADAS!!!

Como siempre que se plantea una Huelga General, estoy escuchando estos días multitud de voces que animan a seguirla para "evitar la aprobación de una Reforma Laboral que destruye todas las conquistas obtenidas por los obreros en décadas de lucha contra los abusos de patronos y empresarios", dándome razones de peso y desmontando supuestamente todas las reticencias que pueden plantearse ante un acto de presión como es este...

Una de esas razones me resulta especialmente interesante. Me dicen, entre otras cosas, que la Huelga es necesaria porque "las grandes conquistas históricas del proletariado se han conseguido a través de la huelga como principal medida pacífica de presión para obligar a los gobiernos y a los caciques a retirar leyes que han ido en contra de los derechos de los trabajadores..."

Bueno, pues ahí sí que no. Por ahí no paso...

No, no me tachéis de inmediato de "retrógrado" o de "conservador" porque no van por ahí mis reflexiones, ni mucho menos. Antes bien, son mucho más radicales. Las cabezas pensantes de los acomodaticios sindicatos actuales parecen olvidarse de una cosita sin importancia: una "Jornada de Huelga General" es una soplapollez como la copa de un pino. Echando un leve vistazo a la historia del movimiento obrero nos damos cuenta de que esas conquistas del proletariado se llevaban a cabo a través de huelgas INDEFINIDAS muy bien preparadas, antes de las cuales se acumulaba un "fondo de resistencia" para ayudar a los obreros a sobrevivir durante los días, semanas... ¡o MESES! que duraba la huelga, PRESIONANDO y ACOJONANDO de verdad a los empresarios para lograr sus objetivos...

Huelgas brutales como la de 1927 en Asturias, con enfrentamientos salvajes contra las fuerzas policiales (e incluso contra el ejército), con disparos, con muertos, con luchas en las calles, con piquetes en las puertas de las fábricas, con los fondos de resistencia agotándose poco a poco en un tira y afloja contra el Gobierno y la patronal, a ver quién aguantaba más: los obreros sin cobrar o las fábricas sin producir... Lo de "¡A las barricadas...!" no era sólo un cántico de manifestación perroflauta: era una puta realidad. Y había que tener cojones para vivirla.





¿Me quiere decir ahora alguien quién demonios estaría dispuesto este jueves a secundar una HUELGA INDEFINIDA de verdad, de las que hacen daño a los gobiernos y terminan derribándolos? ¿Cuántos obreros tendrían huevos de pegarse dos o tres meses (¡o cuatro... o cinco!) sin cobrar por el beneficio común? ¿Quién tendría pelotas de acabar de hundir económicamente el país de forma definitiva? Estamos demasiado bien sentados en un estado del bienestar (que lo es, aunque lo neguemos) como para tener el valor necesario de cargárnoslo con algo así de radical.

Así que nada: huelga general el día 29, salvamos las apariencias, hacemos como que protestamos, ejercemos nuestro derecho, al día siguiente todos contentos (los sindicatos por el rotundo éxito y el gobierno por el clamoroso fracaso) y a final de mes le habréis regalado un día de sueldo a las empresas y la Reforma Laboral seguirá adelante porque hasta el mismo Rajoy contaba ya con una Huelga General, así que no le pìlla de sorpresa...

Yo lo he dicho muchas veces ya: esto sólo se arregla a la desesperada, cogiendo el AK-47 y echándose al monte. Y yo no tengo ni cuerpo, ni edad, ni ánimos para eso...

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