lunes, 30 de enero de 2012

Nuevo año... nuevos propósitos

2012, ya... Cómo pasa el tiempo, rediós. Conmemoración del Compromiso de Caspe (1412) y de las Navas de Tolosa (1212). Destino definitivo donde me toque. Adiós al Gallicum de la vieja Zufaria... Y el fin del mundo, si les hacemos caso a los gilipollas de siempre, que no hay año que no lo profeticen unos u otros...

Ha sido una salida de año, unas Navidades, en general, un poco traumáticas. Una enfermedad repentina que suena fatal (neumonía asociada a una insuficiencia cardíaca, nada menos) hizo que me cogiese la nochevieja ingresado en el hospital universitario "Miguel Servet" de Zaragoza, atendido por unas enfermeras maravillosas y un personal sanitario excelente (y no es peloteo ni lujuria, sino justicia) y acompañado por un anciano de 74 años que no fue un mal compañero de habitación...

Siete días de maldormir y más de veinte kilos adelgazados después (algo bueno debía tener el Hospital) fueron seguidos por un feliz día de Reyes (unos reyes que, por una vez, acertaron con mis gustos), el bautizo de mi sobrinico Dámaso, el cumpleaños de mi hermana, el de mi cuñado y el de mi madre (fiestorras que me han hecho recuperar un par de kilos pero que espero volver a quitarme de encima en estos días ya de mayor frugalidad)...

Y a pesar de todo, de los goteros, de las noches maldurmiendo, de las uvas tomadas en la soledad de la habitación, estas Navidades han sido para mí mucho mejores que las del año pasado. Estaba yo con unos ánimos muy diferentes, a pesar de mi enfermedad. La gente se volcó conmigo y pude ver con toda claridad dónde están los amigos de verdad, los que me quieren, y dónde los falsos o los interesados (que no tuvieron el cuajo ni de preguntar por mí en absoluto). Cada cual que se apunte el tanto donde más le duela. Ellos sabrán. Yo ahora lo tengo más que claro.

No sé si este año terminaré entero. No, no lo digo porque me vayan a descuartizar, pero lo de la gastroplastia supondrá que me quiten las dos terceras partes del estómago, así que por eso lo digo. Ahora estoy en manos ya de los médicos, y a tenor de cómo me han tratado hasta ahora, estoy tranquilo porque sé que son buenas manos, profesionales. En cualquier caso, y a pesar de la crisis, de los recortes y de la puta que los parió, con PP o con PSOE, presiento que va a ser un buen año.

Ojalá no me equivoque...

Feliz 2012 a todos.

(Y me refiero a todos...)

La rana más famosa del mundo



Empezaremos este año 2012 con una de esas viejas historias que nos hacen olvidar un poco la caótica situación en que vivimos...

Situémonos en la bellísima ciudad leonesa de Salamanca a mediados del siglo XVI. La universidad salmantina fue una de las primeras fundadas en España, en 1218, sólo superada en antigüedad por la de Palencia (1208/14). Isabel I de Castilla y Fernando II de Aragón, los Reyes Católicos, tomaron bajo su protección la Universidad de Salamanca y cuando entre 1529 y 1533 se erigió la magnífica fachada que hoy podemos ver en el Patio de Escuelas, fue dedicada a ambos monarcas, que figuran en un gran medallón en medio de la misma con una inscripción en griego a su alrededor que, traducida al castellano, reza: "LOS REYES PARA LA UNIVERSIDAD, Y ÉSTA PARA LOS REYES", haciendo alusión a este patronazgo regio. Su coste fue de 30.000 ducados, pero se desconoce aún hoy quién fue su artífice.

Sin embargo, la fachada de la Universidad de Salamanca, de estilo plateresco (así llamado porque su rica labor ornamental se asemeja a las filigranas de los orfebres y plateros en sus obras) ofrece al espectador algunas curiosidades entre las que destaca la que encabeza esta entrada: la rana más famosa del mundo. Se trata de un anfibio de minúsculas dimensiones, tallado en piedra sobre una calavera. La tradición dice que el estudiante que sea capaz de verla sin que nadie le indique su localización logrará aprobar todas las asignaturas que curse en su carrera universitaria. Cualquiera podría pensar que el detalle de la ranita fue una broma de los tallistas que labraron la magnífica obra, pero hay que tener en cuenta un detalle importante: el arte del renacimiento está lleno de simbología y nada hay en sus obras que esté dispuesto al azar. Nada es lo que parece. Ni siquiera la famosa rana. En su libro "Arte y Humanismo" el ilustre iconólogo e historiador del arte Santiago Sebastián nos da esta explicación:

La fachada de la Universidad de Salamanca está concebida como un Palacio de la Virtud y el Vicio, de manera que presenta DOS puertas (algo inusual, ya que a menudo el número de accesos a un edificio suele ser impar: uno, tres o incluso cinco, en el caso de algunas catedrales), que simbolizan ambas concepciones. La puerta de la derecha está presidida, en la parte más alta de la fachada, por una imagen de Hércules, símbolo de la Virtud, apoyado en su maza o "clava", mientras que la de la izquierda tiene en su parte superior la imagen de la diosa Venus, símbolo del Placer Terrenal (o sea, el Vicio), apoyada sobre una columna. Las imágenes que van desarrollándose bajo uno u otro emblema simbolizan asimismo personajes relacionados con la Virtud (a la derecha: Alejandro Magno, Marco aurelio, trofeos militares, etc.) o el Vicio (a la izquierda: amorcillos juguetones, rostros ensimismados y boquiabiertos, el emperador Nerón...). Los estudiantes entrarían, así, por la puerta de la Virtud y saldrían por la del Vicio.

¿Y la rana? ¿Por qué una rana sobre una calavera? Ya hemos dicho que nada en el arte del Renacimiento está ahí por azar o casualidad. Santiago Sebastián explica que la rana es el símbolo de la Lujuria, que suele representarse como una mujer con una rana posada sobre el sexo, por lo que en este caso podría ser una imagen de la Muerte motivada por este vicio de la Lujuria. Sin embargo nos encontramos con un problema: la famosa rana se encuentra A LA DERECHA de la fachada (no os voy a decir dónde exactamente), por lo cual su localización es errónea. El profesor Sebastián afirma, así, que los canteros pudieron sufrir un error de interpretación al tallar el simpático animalito en un lugar equivocado: debería estar a la IZQUIERDA, bajo la imagen de Venus...

Se han dado muchas interpretaciones a la presencia de este bicho: otra posibilidad es que haga referencia al príncipe Juan, hijo de los Reyes Católicos, muerto a los 19 años por abusar del "débito conyugal" (unido a la mala salud endémica del infante) con su esposa la princesa Margarita de Austria, pero en cualquier caso hoy "la rana más famosa del mundo" constituye uno de los muchos atractivos turísticos de la bella ciudad leonesa... No os la podéis perder.